El tópico también funciona cuando hablamos de vivienda: ‘Spain is different’. Los españoles cuentan con un modelo de hogar que se distancia del asentado en muchos de nuestros 28 vecinos europeos. Una especial idiosincrasia que, sobre todo, se traslada al tipo de casa: con el 65,4%, España es el país donde más personas viven en pisos. Repasamos el informe de Estadísticas sobre vivienda de Eurostat,. En él, la Oficina Europea de Estadística realiza una foto fija del mercado de la vivienda con datos referenciados a 2013.
El 65,4% de los españoles vive en pisos ubicados en inmuebles de edificación vertical, un porcentaje que solo es similar al de las repúblicas bálticas de Letonia (65,3%) y Estonia (63,8%), dos países con una superficie de construcción más limitada. El dato contrasta con el 70,9% de personas que habitan casas aisladas en Croacia, el 66,5% en Eslovenia o el 61,1% de Noruega, una estadística en la que España ocupa la penúltima posición con el 33,1%. Solo en Malta menos ciudadanos viven en viviendas de tipo unifamiliar. En cuanto a las adosadas, son los Países Bajos (60,7%), el Reino Unido (60%) e Irlanda donde más ciudadanos se instalan en este tipo de construcción, frente al cerca del 20% de habitantes que lo hace en España.
Alto porcentaje de vivienda en propiedad
El 42,7% de la población europea vive en una casa en propiedad pagada y otro 27,3% en una casa con el préstamo o la hipoteca aún vigente. De este modo, 70 de cada 100 europeos vive en una casa en propiedad, un dato aún superado por España con 78 propietarios de cada 100 habitantes, por debajo del 96,1% de Rumanía o el 90,3% de Eslovaquia.
Sin embargo, el informe refleja una nueva tendencia en España por la que la vivienda en alquiler poco a poco va ganando peso. Así, el 21,2% de la población vive bajo el régimen de arrendamiento, con tendencia al alza como ocurre en otros países de Centroeuropa. Hay que recordar que no hace muchos años la cifra de inquilinos en España no llegaba al 10%.
De esta manera, el régimen de tenencia en propiedad español va perdiendo peso aunque aún estemos lejos de las cifras de Alemania, con el 52,6%, o de Suiza, el más bajo del continente, con el 48%.
En cuanto al porcentaje de población europea que ocupa viviendas de alquiler reducido o gratuito, en ningún país supera el 20%. En este apartado de la estadística destacan países como Malta, Eslovenia, Estonia o los más cercanos: Francia, Reino Unido o Austria, donde la política de alquiler municipal está aún muy extendida. En España este porcentaje se ubica en torno al 10%.
Hogares más asequibles que la media europea
El informe de Eurostat analiza el nivel de asequibilidad de la vivienda, un índice que ha preocupado en los últimos años por el deterioro que ha sufrido como consecuencia de la crisis económica. En concreto, el 11% de los europeos destinaba más del 40% de su renta disponible al pago de la vivienda y/o sus suministros básicos (electricidad, agua, calefacción…).
Eurostat también advierte de que la media de la UE de los 28 encubre diferencias importantes entre sus estados miembros y en el seno de los propios estados. Así, si bien España se ubica ligeramente por debajo de la media con el 10,3%, este dato se dispara hasta el 42% cuando se analiza solo al colectivo de personas que vive en régimen de alquiler a precio de mercado, donde el pago de la renta implica una mayor carga económica.
Pero el esfuerzo medio que se realiza por coste de la vivienda es superior en países como Dinamarca, donde el 18,9% de la población invirtió en 2013 más del 40% de su renta en sufragar estos gastos. Este porcentaje es del 16,4% en Alemania, del 15,7% en los Países Bajos o del 15,4% en Rumanía. En el otro extremo, los ciudadanos de Malta, Chipre, Irlanda y Finlandia son los que menos porcentaje de sus ingresos destinan a este fin, en todos los casos por debajo del 5%.
Con esta misma finalidad de velar por la política de la vivienda de los estados miembros de la UE, en el informe también se recoge la tasa de hacinamiento, indicativo de las personas que habitan viviendas sobreocupadas con relación al número de habitaciones.
En 2013, el 17,3% de la población europea residía en viviendas sobreocupadas. El problema es especialmente significativo en países como Rumanía (el 52,9% de sus ciudadanos habitan este tipo de hogares), Hungría (45,7%) o Polonia (44,8%). En el caso español, la tasa de hacinamiento ronda el 7%, ubicándose en la franja más baja del continente aunque por encima de Bélgica, Chipre o Países Bajos (donde en ningún caso supera el 3%) y por debajo de otros como Reino Unido, Francia o Suecia.