Edificios neutros de carbono

Equipo de Redacción

La UE acuerda que, a partir de 2030, los edificios de nueva construcción deberán ser neutros en emisiones contaminantes

Desde el blog de Haya, queremos hablar sobre la importancia de este acuerdo al que han llegado los negociadores del Parlamento Europeo y de los Veintisiete. Han aprobado una reforma en las reglas sobre la eficiencia energética en el sector de la construcción que tiene como principal objetivo terminar con las emisiones de CO2 emitidas por los edificios.

Además, esta reforma no solo prevé que los edificios sean neutros en emisiones a partir de 2030, si no que, además, en 2050, lo sean en la totalidad del parque inmobiliario de la Unión Europea. La vicepresidenta tercera del Gobierno y responsable de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha celebrado estas medidas haciendo alusión a la importancia de este gran paso hacia el objetivo de la Unión para 2050, ya que los edificios son responsables de más de un tercio de las emisiones de gases efecto invernadero en Europa.

Qué son los edificios neutros en carbono, cómo se consiguen y porqué hacen falta

Los edificios, englobados en el sector residencial-servicios, son los mayores consumidores de energía en Europa, según estimaciones del Eurostat.

El consumo de energía, que viene sobre todo de combustibles fósiles, supone la emisión de gases efecto invernadero (GEI) y contaminación, implicados en el cambio climático.

Los edificios neutros en emisiones de carbono ayudarían a este problema. El uso de aislamientos y de diversos sistemas de producción energética, supondría un balance cero en emisiones de CO2.

Esto hace que la huella de carbono se reduzca y con ello, nos beneficiaríamos los ciudadanos gracias a una mejora de la salud, el medio ambiente y la economía.

Como conseguir esta emisión cero es otro debate abierto entre gobiernos, expertos y arquitectos. Los objetivos ambiciosos para 2050, no deben parar, según ellos, la necesidad de implantar cambios y hacer pequeñas inversiones que puedan reducir hasta el 50% de la energía en los edificios.

Algunos ejemplos son: ventanas de doble aislamiento, calderas de biomasa, aislamiento del edificio, utilización de bombillas de bajo consumo, paneles solares fotovoltaicos y térmicos, electrodomésticos de alta eficacia energéticas, etcétera.

Todos podemos poner nuestro granito de arena para hacer de nuestros hogares un lugar más sostenible y eficiente.