Imagina despertarte en una habitación sumergida, con paredes de cristal para sentirse rodeado por toda la vida que crece en un arrecife de coral. Ese será el privilegio de los propietarios de las 42 villas de lujo flotantes que están construyéndose a cuatro kilómetros de la costa de Dubai.

La propuesta, denominada The Floating Seahorse, es un suntuoso desafío arquitectónico que forma parte de un proyecto aún mayor, The Heart of Europe (THOE): la construcción de seis islas artificiales para conquistar el mar y hacerlo habitable.

En cada una de ellas (de nombres Alemania, Holanda, Suiza, Suecia, Austria y San Petersburgo), los promotores del grupo Kleindienst crearán paraísos de arena blanca, lagunas y jardines tropicales, resorts de 7 estrellas y restaurantes y locales únicos… para clientes muy exclusivos.

Las villas flotantes se están levantando en la isla de San Petersburgo, diseñada con forma de corazón, inspirándose en una de las que constituyen el archipiélago de las Maldivas.

 

Casas por 2,2 millones de euros

Está previsto que el complejo residencial se concluya a principios del próximo año, aunque hay dos casas terminadas, que se han vendido por 2,1 y 2,2 millones de euros. Cada una con casi 300 m² útiles repartidos en tres plantas.

En la superior se ubica una terraza, con piscina de hidromasaje, solárium, una cocina exterior para disfrutar de comidas al aire libre y una zona de relax. El piso intermedio se destina a las estancias comunes (una enorme salón con vistas al océano, cocina, dos baños, otro solárium flotante y dos o tres habitaciones).

La espectacularidad del piso inferior nos transporta hasta el mismo corazón del arrecife. Las paredes del dormitorio principal y del baño son ventanas que ofrecen el fondo marino como paisaje incomparable. La fauna rodea las dos estancias y los rayos del sol que atraviesan el agua crean una luminosidad que resalta los colores intensos del coral.

Como explican los promotores del proyecto, “las villas Floating Seahorse ofrecen una nueva dimensión de la vida encima y debajo del agua, además de unas comodidades excelentes”.

El lujo no solo radica en su ubicación. Las casas cuentan con avances en domótica que permiten el control de la temperatura, las luces, los accesos e incluso los electrodomésticos desde el móvil. Placas fotovoltaicas abastecerán de energía eléctrica, y sistemas de desalinización proporcionarán todo el agua potable necesaria.

Los ingenieros que están haciendo realidad el THOE demuestran así que los avances técnicos ya permiten crear zonas residenciales donde antes no existían los recursos para hacerlo. Es posible que en un futuro próximo las ciudades se expandan hacia el mar sobre plataformas e islas artificiales. Todo un océano por descubrir.

Fotos: http://www.thoe.com/en/gallery/photos/