En mis pasadas vacaciones en Andorra tuve problemas para encontrar un lugar donde alojarme; no tuve otra opción que quedarme en un modesto hotel a la entrada de la ciudad. Las fotos no decían gran cosa del lugar, más bien al contrario, y mis expectativas eran poco alentadoras respecto a la habitación.
Sin embargo, fue una grata sorpresa descubrir que la realidad superaba las pocas esperanzas que había depositado en el lugar. Encontré una estancia más amplia y luminosa de lo que esperaba aunque, todo hay que decirlo, la decoración le hacía un flaco favor a la escena: unas tablas hacían de mesita, la colcha de la cama era de un color rojo demasiado chillón y una lámpara clásica sobre una mesa moderna aportaba poco al lugar.
Mi mente de home stager, decoradora especializada en producto en venta o alquiler, se puso a dar vueltas imaginando lo bonito que podría quedar aquel lugar con unos pequeños toques estéticos y una fotografía bien hecha. La materia prima era buena, el espacio cumplía con los requisitos propios de un lugar agradable, por su espacio, su luz y sus vistas a la montaña. Lo único que necesitaba era cambiar algunos elementos que no supondrían un gasto excesivo y la inversión se recuperaría rápidamente.
No se deben perder oportunidades comerciales sólo porque la presentación no sea buena. En este sentido, Raúl Hernández, director de Relooking Home, empresa especializada en optimizar estancias de alquiler temporal, asegura que «gran parte de los pequeños hoteles de nuestras ciudades no se han adaptado en los últimos años a las exigencias de los clientes de hoy. En un periodo breve de tiempo se puede conseguir que el vestíbulo, carta de presentación de cualquier hotel, así como las habitaciones, cambien radicalmente y atraigan a un mayor número de clientes».
A continuación, explicaré algunas pautas sencillas, baratas y útiles para mejorar la decoración de este tipo de alojamientos:
- Para empezar hay que fijarse en paredes y suelos: ¿de qué color son? La colcha de la cama debe combinar con ambos. Si son oscuros, la colcha tendría que ser clara; si son claros, la colcha puede presentar un color más saturado.
- El segundo factor es el mobiliario. Los diferentes elementos que lo conforman tienen que combinar entre sí, y hay que evitar el aspecto de dejadez. Si el mobiliario es sencillo o de calidad es una cuestión que dependerá del presupuesto de la empresa, pero de igual modo, será necesaria una coherencia estética entre los diferentes elementos colocados, los armarios empotrados preexistentes y el pavimento.
- La luz es esencial para estas estancias. Lo más importante es crear un ambiente cálido, acogedor, y retratarlo tal cual. Para ello, las mesitas han de estar iluminadas con lámparas de luz cálida. En el techo es necesaria una lámpara que ilumine la habitación de manera general. Esta luz tendrá que estar encendida durante el reportaje fotográfico a pesar de que haya luz natural para crear una atmósfera de confort capaz de llamar la atención al posible turista.
- Todo el hotel debe estar decorado y trabajado de la misma manera, con la misma coherencia estética. Sería bastante extraño, y por ende, negativo, encontrar una recepción anticuada o muy moderna, y una habitación renovada al estilo minimalista o floral.
- El papel de la fotografía profesional es fundamental. Hoy en día se visita a menudo Internet para alquilar una habitación de hotel. Por ello, y para destacar el alojamiento en la red, es más que necesario contar con los servicios de un fotógrafo/a profesional que sepa sacar el máximo partido a cada estancia.
El éxito comercial se fundamenta en numerosas ocasiones en la forma de presentar un producto y, aunque puedan parecer evidentes, muchos de estos puntos son olvidados en la práctica. La buena noticia es que para hacerlo no hace falta desembolsar grandes cantidades de dinero. Si quieres alquilar tu estancia de vacaciones a través de la red sólo necesitarás tener en cuenta estos consejos y hacer unas buenas fotografías.