En muchas ocasiones, la primera impresión es la que cuenta. Y ocurre que, cuando hablamos de un anuncio inmobiliario, dejar pasar la oportunidad de captar la atención del futuro comprador en el primer contacto puede significar, con mucha probabilidad, no disponer de una segunda ocasión para vender una casa.
Es por ello que, a la hora de poner una vivienda a la venta a través de un portal inmobiliario online, es esencial cuidar la parte visual del anuncio. Contar con unas buenas fotografías o, incluso, un vídeo del inmueble, conseguirá que más personas se interesen por él, con lo que las posibilidades de vender una casa en un corto periodo de tiempo aumentarán considerablemente. En sentido opuesto, unas imágenes descuidadas pueden producir rechazo y frustrar toda oportunidad de venta.
Estos son algunos trucos básicos a tener en cuenta para hacer fotos y así poder vender una casa con éxito:
1. Prepara la casa para las fotografías
Al igual que una persona se acicala antes de una sesión de fotos, es importante que el inmueble también esté preparado para mostrar su mejor cara y todos sus atractivos. Para vender una casa, esta debe estar limpia y ordenada, pero si lo que desea es lograr un aspecto de profesionalidad, también se deben retirar del encuadre todos los objetos accesorios. Por poner un ejemplo, una fotografía de un experto mostrará la encimera de la cocina vacía, libre de paños, batidoras, tablas de cortar o tostadores que puedan desviar la atención.
Se trata, en definitiva, de mostrar un hogar acogedor pero despersonalizado. Camas hechas, armarios cerrados y alguna concesión ornamental: unos cojines en el salón o unas flores frescas pueden dar un toque de color a un salón o, si en el baño se muestran las toallas, asegúrate de que parezcan preparadas para que las utilice un huésped de hotel.
¿Las paredes necesitan una mano de pintura? Es el momento de dársela o, incluso, ir un paso más allá: si la vivienda muestra un aspecto desaliñado aún estando limpia, invertir en un servicio de home staging conseguirá, con toda probabilidad, que el inmueble se venda antes e, incluso, a mejor precio.
2. La importancia de la luz
La fotografía es, esencialmente, luz, y de ella dependerá directamente la calidad de las imágenes que tomes. La luminosidad es uno de los aspectos más valorados en las viviendas (más aún tras el confinamiento propiciado por el COVID-19) y de su mayor o menor presencia también dependerá la viveza de los colores y la sensación de limpieza que transmitan el vídeo y las fotografías.
Al contrario de lo que ocurre con la fotografía en exteriores, para la que recomienda apostar por las primeras o últimas horas de sol, para fotografiar interiores lo mejor es optar por las horas centrales del día. Si el cielo no está despejado, mejor dejarlo para otro momento, pero si brilla el sol es el momento de poner la cámara en marcha. ¡Y con las cortinas bien abiertas!
Si la casa a la venta es realmente oscura, no quedará otra que apoyarse en luz artificial. En ese caso, conviene que toda la luz provenga del mismo tipo de bombilla ya que si se combina una iluminación fluorescente con una bombilla de tungsteno, por ejemplo, el resultado no será el deseado.
3. Encuadre y composición
En el momento de sacar fotografías o grabar vídeos de una vivienda se deben buscar las perspectivas que mejor resalten los atributos positivos del inmueble. Se trata, eso sí, de persuadir a través de la imagen, no de manipular.
Unos conocimientos básicos de composición fotográfica serán de gran ayuda para disparar con acierto pero, si no se poseen, se pueden compensar realizando distintas pruebas desde ángulos diferentes y, a posteriori, elegir las mejores. Lo mismo ocurre con el equipo fotográfico: lo ideal es contar con un objetivo gran angular que permita incluir una habitación completa en una fotografía o plano. En caso contrario, habrá que realizar varias tomas complementarias en cada estancia.
Como regla general, conviene fotografiar o grabar colocando la cámara a la altura del pecho con una inclinación tal que el encuadre muestre un poco menos de techo que de suelo.
4. Selección y edición: hacia el tour virtual
Otro de los trucos a tener en cuenta para hacer fotos y así vender una casa con éxito es que se muestre la vivienda de la misma manera que se recorrería de forma natural entrando por la puerta de entrada. Alrededor de 20 fotografías deberían ser suficientes para una casa de tamaño medio (con al menos una del exterior, dos o tres si se trata de una casa o un chalet) y, si hablamos de un vídeo, un minuto o minuto y medio debería ser más suficiente para recorrer la vivienda completa. Esto se aplica tanto a la hora de hacer fotos como de grabar vídeos.
5. ¿Insatisfecho con los resultados? Considera recurrir a un profesional
Si estos trucos para hacer fotos o vídeos no te ayudan para vender una casa, te recomendamos que contactes con un profesional. El precio de una sesión de fotos profesional ronda los 150 euros de base, aunque esta cantidad puede variar en función del profesional elegido y doblarse (o triplicarse) si incluye la grabación y edición de vídeo. Puede parecer un alto desembolso comparado con la alternativa. de hacerlo uno mismo gratuitamente pero si el resultado no está a la altura, la venta de la vivienda puede retrasarse indefinidamente ya que el anuncio no logrará el cometido de captar el interés de los futuros compradores: ante esa perspectiva, invertir unos cientos de euros puede ser una gran idea que ahorre tiempo y quebraderos de cabeza.