Muchos comienzan ya sus vacaciones estivales pero otros tendrán que quedarse en casa. Quizá el trabajo, la economía o algún asunto familiar te impidan hacer las maletas este año irte fuera de la ciudad. Pero en lugar de ver los inconvenientes, trata de sacarle el máximo partido y descubrir aquellos rincones de tu entorno que tienes muy olvidados. Si este verano te quedas en casa, descubre estos planes para salir de la rutina.
Madrid, diversión asegurada
Estar en remojo puede que sea la mejor de las opciones para combatir el calor madrileño. Cuando el termómetro sube, el agua es el mejor aliado. ¿Has estado alguna vez en el Pantano de San Juan? Lo llaman “la playa de Madrid” y está a 50 kilómetros de la capital. Es un lugar perfecto para perderte en familia o en pareja y donde también puedes practicar deportes acuáticos o navegar por el propio pantano.
Los parques temáticos son otro clásico que triunfa en verano y más si toca estar en casa con niños. Las montañas rusas, los toboganes de agua o los parques con animales son el plan perfecto para muchas familias. El Zoo de Madrid, Faunia, el Parque de Atracciones, el Parque Warner o el Acuópolis te ofrecerán un montón de alternativas.
Los meses de julio y agosto también son un buen momento para descubrir esos rincones olvidados de Madrid. Pasear por el Templo de Debod y ver desde allí el atardecer, recorrer los barrios de Chueca, Latina y Malasaña y saborear una caña con una tapa o recorrer el Madrid de los Austrias para desembocar en el Palacio Real, son algunas de nuestras recomendaciones.
Si es el primer verano que te quedas en Madrid, quizá hayas pasado por alto que la capital celebra varias verbenas durante el mes de agosto. Las fiestas de San Cayetano comienzan el día 1 en el área urbana de Embajadores. A partir del día 8 se celebran las de San Lorenzo en Lavapiés y por último, y quizás las más conocidas tienen lugar del 11 al 15 de agosto y son las fiestas de La Paloma, en pleno distrito latino. Una manera muy especial de vivir el ambiente castizo que ofrece la capital.
Barcelona, una ciudad llena de planes culturales
Su ruta vinícola es uno de los atractivos más señalados y si este verano estás en la metrópoli, quizá sea el momento para descubrirla. En la zona sur de Barcelona, concretamente en el Penedés, podrás saborear los mejores caldos, disfrutar de catas y recorrer un paisaje de viñedos con mucha historia.
La suerte de quedarse en verano en la ciudad condal es que aquí, a diferencia de Madrid, sí hay playa, con lo que su atractivo es aún mayor. La Barceloneta es la más conocida y céntrica, aunque en verano se llena de curiosos y turistas. Así que si buscas algo más de tranquilidad, puedes coger el coche y en pocos kilómetros llegarás a las playas de Sitges o Vilanova y la Geltrú.
Si lo tuyo es pasión por el cine de verano, estás de suerte porque tienes la opción de disfrutar de las mejores cintas en versión original o doblada. Uno de los lugares más emblemáticos para ello es los jardines de Santa Eulália del Castillo de Montjuïc. La entrada ronda los 6 euros para os adultos y 4 euros para los niños. Aquí puedes consultar la cartelera.
Valencia: disfrutar de excursiones al aire libre
No cabe duda que uno de los grandes atractivos de Valencia es la Ciudad de las Artes y las Ciencias: un lugar maravilloso para visitar con niños. Una mezcla entre ciencia y fauna que encandila a los pequeños de la casa y donde no puedes olvidar entrar en El Hemisféric y en el Oceanográfic. Sin embargo, en Valencia hay muchos más planes por hacer. También con peques, un plan perfecto es ir al Bioparc, un zoológico donde verás especies muy curiosas propias de todos los continentes.
Si prefieres un plan más urbano y te encanta la Fórmula 1, puedes recorrer el antiguo Circuito Urbano de Valencia que fue testigo de las mejores carreras de la historia.
Si no te da pereza coger el coche, puedes alejarte unos kilómetros y disfrutar de maravillosas playas como el Saler y tomar una deliciosa paella valenciana. También puedes aprovechar para hacer una excursión en Pou Clar, en Ontinyent, un oasis natural bañador por algunas lagunas con agua transparente. Y si quieres volver a tu niñez y compartir un día realmente especial con tus hijos, saca del trastero tu vieja cometa y hazla volar en el Parque Natural de la Albufera o en la propia playa de la Malvarrosa.