Pequeños terrenos rústicos que pueden interesarte en Castilla-La Mancha

Los terrenos rústicos se revalorizan. ¿Qué buscan los inversores en Castilla-La Mancha?

Equipo de Redaccion

13 de Enero de 2015

Los inversores regresan al campo. Desde pequeños terrenos hasta fincas de gran superficie, las propiedades rústica s se revalorizan debido a una demanda creciente.

“La gente todavía sigue desconfiando de dónde invertir el dinero. Muchos piensan que en la tierra está más seguro que en cualquier otro sitio, y de ahí el renovado interés por estas propiedades que hemos observado en los dos últimos años”, explican desde Aldeasabandonadas.com, plataforma especializada en el mercado rural.

Castilla-La Mancha es una de las regiones que experimenta una mayor actividad de compraventa. Los registros de la propiedad muestran que en los últimos seis meses se cerraron 754 transacciones de terrenos, lo que hace de esta comunidad autónoma la cuarta de España en número de operaciones.

El Instituto Nacional de Estadística añade que en 2013 ya se manifestó la tendencia positiva en este mercado con un incremento del 1,3% en los precios de las fincas castellano-manchegas con respecto a los ejercicios anteriores, un crecimiento derivado de un aumento de la demanda. Actualmente, dichos precios se mantienen estables.

Según los expertos de Aldeasabandonadas.com, la mayoría de los pequeños inversores son locales o tienen vínculos con la zona, son amantes del campo que buscan explotar la tierra o un determinado cultivo.

Viñedos y olivos, lo más valorado

En esta región, los terrenos con viñedo u olivos, más abundantes en Toledo y Ciudad Real, son los más demandados y, por tanto, los más caros. Entre los compradores también son muy apreciados los encinares de Guadalajara y las propiedades cercanas a los ríos de Albacete y Cuenca, típicas cuencas piscícolas ricas en truchas que atraen a los más de 150.000 pescadores registrados en la comunidad.

Según la empresa de tasación Tecnitasa, las fincas de secano son las que están experimentado una mayor revalorización, precisamente las más abundantes en Castilla-La Mancha.

El precio medio de una finca de secano en la región se sitúa en una horquilla que va desde los 5.000 hasta los 15.000 euros por hectárea, y en regadío entre 18.000 y 35.000 euros por hectárea. Aunque, como explican los expertos, existen otros factores que inciden directamente en el precio final como si tiene o no instalaciones, accesos, agua o su ubicación geográfica, entre otros.

Nos encontramos, por tanto, ante un mercado de propiedades muy activo, con unos precios en moderado ascenso y una oferta amplia y diversa respecto a las características de la tierra, su ubicación y las posibilidades de uso. Todo eso hace que invertir en terrenos en Castilla-La Mancha sea una opción interesante y rentable.

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