Su intervención es crucial en cualquier tipo de contratos con inmuebles de por medio. Analicemos sus responsabilidades en las diferentes situaciones a partir de la información del Consejo General del Notariado.
1. Compraventa de una casa
- En primer lugar realiza una comprobación registral del inmueble.
- Verifica los títulos de propiedad y la identidad y capacidad legal del vendedor para realizar la operación.
- Comprueba la situación registral de la propiedad, si el inmueble tiene cargas.
- Puede consultar, en los municipios en los que esté habilitado, si la casa está al corriente en el pago del IBI.
- Se asegura de que ambas partes entienden todos los puntos del contrato que han acordado.
- Presta asesoramiento jurídico imparcial e información legal y tributaria, estando obligado a ofrecer una asistencia especial al otorgante necesitado de ella, tal y como recoge el artículo 147 del Reglamento Notarial.
- Redacta la escritura pública con todas las condiciones, la autoriza en presencia de las partes y la presenta por vía telemáticaen el Registro de la Propiedad, tal y como asegura el Consejo General del Notariado.
- Se le puede encomendar el pago de los impuestos asociados a la compraventa: Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), Actos Jurídicos Documentados (AJD) y el del incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana. La mayoría de estas acciones las hará vía online, con el consiguiente ahorro de tiempo y de papeleo.
2. Firma de una hipoteca
- La principal responsabilidad de un notario en el cuando hay préstamo hipotecario es asegurarse de que quien recibe el préstamo entiende a lo que se está comprometiendo y conoce todos los detalles. Para ello tiene que explicárselo con un lenguaje claro y debe prestarle asesoramiento jurídico imparcial e información legal y tributaria. Además debe brindar asistencia especial al otorgante necesitado de ella.
- Verifica que todo en el contrato sea legal y que los tipos de interés de la escritura se adapten a los tipos de interés oficiales del Banco de España.
- Analiza las cláusulas del contrato y la documentación adjunta para comprobar que todo está claro y no se oculta información.