Lo que pensamos gastarnos en una vivienda y lo que finalmente invertimos son cifras que no suelen coincidir. Así lo expone el informe Experiencia de compra y venta de vivienda en el último año, realizado por el portal inmobiliario Fotocasa.

Según sus datos, el presupuesto medio de los españoles que han comprado o han querido hacerlo en los últimos 12 meses fue de 160.000 euros, sin embargo, el desembolso final resultó un 8% mayor: 173.000 euros.

Y eso a pesar de que el 61% de los compradores negoció y logró reducir el precio inicial una media del 10%. De hecho, el precio medio de salida de quienes vendían su propiedad fue de 180.000 euros.

Como era previsible, hay claras diferencias en los datos si el estudio se segmenta por comunidades autónomas. El presupuesto medio final en la Comunidad de Madrid fue de 212.000 euros; en Cataluña, de 206.000; en el País Vasco, de 191.000; en la Comunidad Valenciana, de 146.000, y en Andalucía de 126.000.

Es el mercado el que fija los costes y el que termina por limitar nuestros deseos, como también revela el informe. Por ejemplo, el 46% de los compradores tenía la intención de adquirir un piso y, finalmente, la cifra asciende hasta el 55% de los nuevos propietarios.  Eso quiere decir que un 9% tuvo que rebajar sus expectativas (casa unifamiliar, adosados…) porque iban más allá de su presupuesto.

Otra prueba de cómo la realidad cambia nuestras pretensiones es que un 10% de los que buscaron casa esperaba hacerse con un ático, pero solo lo pudo conseguir un 5%.

Menos espacio y diferente ubicación

La necesidad de ajustarse a la oferta se aprecia igualmente en los otras dos características esenciales (después del precio) para realizar la compra: las dimensiones y la ubicación.

Tomando como referencia Cataluña por ser el caso más significativo, vemos en el informe que el 25% buscaba una casa con menos de 80 m², aunque al final un 37% se conformó con una propiedad dentro de esas dimensiones.

Los datos sobre la ubicación son también reveladores: el 77% de los compradores quería una casa en la ciudad donde residía, pero lo consiguió un 70%. Y el 40% deseaba seguir en el mismo barrio, y la cifra se redujo finalmente al 32%.

En todo caso, las diferencias entre precios y presupuestos no han rebajado el dinamismo del sector inmobiliario. El estudio de Fotocasa muestra que los tiempos para comprar o vender vivienda se acortan, lo que significa que aumenta tanto la oferta como la demanda.

Un 67% de los compradores en el último año encontró lo que pretendía en menos de seis meses; un 17% tardó entre seis meses y un año. Respecto a los propietarios, algo más de la mitad consiguió vender su vivienda en menos de seis meses y un 18% lo hizo entre los seis meses y el año. La tendencia es que se sigan acortando esos plazos.