Comprar una vivienda nueva de 90 metros cuadrados en una capital de provincia implica un desembolso de 190.800 euros, y a su pago un español dedicará el equivalente a 7,4 años de su sueldo anual. En 2016, el precio de la vivienda se incrementó en el 3,3%, aunque con un comportamiento más discreto en el último semestre del año, periodo en que experimentó un alza del 1,9%. Una moderación en el incremento de los precios que se espera domine a lo largo de 2017, excepto en Madrid y Barcelona, ciudades que desde la reactivación del mercado registran una subida más acelerada.

Un resumen de las principales conclusiones del informe anual Tendencias del sector inmobiliario de vivienda nueva de ST (Sociedad de Tasación) arroja un precio medio por metro cuadrado de 2.120 euros, siempre para viviendas nuevas ubicadas en capitales de provincia.

El estudio muestra las diferencias de comportamiento del coste de la vivienda en localidades de distintos tamaños, teniendo en cuenta que en prácticamente todos los municipios analizados siempre fue al alza, aunque con matices:

• Capitales de provincia de más de 100.000 habitantes: El comportamiento de los precios fue significativamente inferior en 2016. En este caso la subida fue de 1,1%, alcanzando un precio de 1.675 euros/m2.
• Ciudades de 50.000 a 100.000 habitantes: El precio en este conjunto de localidades se ha situado en 1.557 euros/m2, con una variación anual del 1,3%.
• Ciudades entre 25.000 y 50.000 habitantes: En ellas subió el 1%, dejando el precio medio por metro cuadrado en 1.476 euros.
• Ciudades de menos de 25.000 habitantes: En este caso el comportamiento del precio recogió una discreta subida del 0,7%, ubicando el metro cuadrado en 1.470 euros.

 

Precios moderadamente ascendentes

Este escenario muestra que «el precio de la vivienda continúa la senda ascendente iniciada en 2015, si bien lo hace de forma muy moderada en la mayoría de los casos», explican los expertos de ST. Un comentario que encuentra sus excepciones en los mercados de las dos grandes capitales: Madrid y Barcelona marcan un ritmo ascendente más vigoroso desde el inicio de su recuperación, que en 2016 fue de 4,9% y el 6%, respectivamente.

La producción de viviendas, según datos de visado del Ministerio de Fomento, creció en torno al 25%, lo que se valora como un ritmo positivo, aunque «por debajo de lo que se considera adecuado a las necesidades de la población». En cuanto al volumen total de transacciones inmobiliarias, creció un 15% en los primeros nueve meses del año, y en comparación con el mismo periodo de 2015. Este porcentaje incluye vivienda nueva y de segunda mano.

Fuente: Tendencias del sector inmobiliario, ST, Sociedad de Tasación, enero 2017

 

Crecimiento de precios condicionado

Todo parece indicar que el comportamiento del mercado en 2017 será similar al del pasado año, dibujando una suave curva ascendente. Sin embargo, se recomienda prestar atención a una serie de factores que pueden acelerar o ralentizar el ritmo de la recuperación:

• Las iniciativas sobre política de vivienda de los gobiernos central y autonómicos.
• El impacto de las negociaciones del Brexit, que previsiblemente se iniciarán en este ejercicio.
• El mantenimiento de la buena rentabilidad que proporciona el mercado de alquiler en comparación con otros productos financieros con similar nivel de riesgo.
• La evolución de los grandes indicadores económicos (PIB, tasa de desempleo…) y su impacto en las economías familiares.

 

Años de trabajo para comprar una casa

El índice de esfuerzo inmobiliario ofrece una visión muy reveladora del compromiso que un español adquiere con la compra de una vivienda. Este indicador lo calcula ST con datos de los ingresos medios anuales que cada comunidad autónoma ofrece a la Encuesta anual de estructura salarial del INE, y los precios del mercado de la vivienda.

Según los datos, los riojanos son los ciudadanos que menor esfuerzo realizan, empleando 4,6 sueldos anuales; y los baleares los que más, con 15,8. En el caso de estos últimos, el dato es mayor al doble del esfuerzo medio del español, que se cifra en 7,4 años de ingresos.

Fuente: Tendencias del sector inmobiliario, ST, Sociedad de Tasación, enero 2017