Cuando damos al interruptor para apagar la televisión, la radio o el microondas, en realidad no se desconectan por completo, entran en stand-by o ‘modo en espera’, lo que se indica en el dispositivo con una tenue lucecita roja o verde.
Al seguir en red continúan consumiendo electricidad, generando un gasto fantasma que nos cuesta más dinero de lo que creemos. Según las estimaciones del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), supone el 10,7% del consumo total de los electrodomésticos, muy similar al de la lavadora (11,8%) o al del televisor (12,2%).
El método más sencillo para evitarlo y conseguir ahorrar un poco es desenchufar los aparatos de la red, aunque en algunos casos resulta una tarea demasiado incómoda, sobre todo cuando los dispositivos están empotrados o cuentan con relojes programables.
Lo mejor es conocer cuánto gasta cada electrodoméstico en modo espera para saber si compensa o no el pequeño esfuerzo de quitar el cable del enchufe. El Lawrence Berkeley National Laboratory, un prestigioso instituto científico de California (EE.UU.), ha realizado un estudio que nos aclara este asunto.
A partir de sus datos, puede elaborarse un ranking con los que más consumen en stand-by:
- Decodificador de la televisión por cable o por satélite. Gasto medio: 43,4 vatios por hora (Wh). Con mucho, el dispositivo con mayor consumo fantasma, por lo que compensa apagarlo siendo tan fácil de desconectar.
- Ordenador portátil. Gasto medio: 8,9 Wh. Si te limitas a bajar la pantalla sin apagarlo, tendrás que recargarlo mucho antes de lo necesario y apagarlo definitivamente es sencillo.
- Equipo de sonido. Gasto medio: 8,3 Wh. Si además cuenta con radio, el gasto puede subir hasta los 14,4 Wh. Es un aparato fácil de desconectar.
- Televisión de proyección trasera LCD. Gasto medio: 6,6 Wh. Las pantallas LCD son de bajo consumo, pero este sistema lo encarece. Gasto medio: 3,8 Wh.
- Ordenador de mesa. Gasto medio: 2,8 Wh, siempre que esté apagado pero no desconectado de la red. Si lo dejamos en función Sleep (dormido), el consumo aumenta a 21,1 Wh. Y si nos limitamos a apagar solo la pantalla, el gasto se dispara a los 73,9 Wh. Gasto medio: 1,1 Wh.
- El consumo es bajo, pero desenchufar la cafetera cuesta muy poco. Gasto medio: 1 Wh. En el caso de dejarla en función ‘lista para usar’, llegaría a los 23,3 Wh.
- Teléfono fijo inalámbrico. Gasto medio: 0,98 Wh. Quizá no merece la pena desenchufarlo porque el dispositivo podría descargarse y no recibiríamos llamadas.
- Cargador del móvil. Gasto medio: 0,26 Wh. Muchos se limitan a desconectar el móvil del cable, pero no el cargador. El consumo es reducido, pero es muy fácil de evitar.